La miel es una maravillosa y dulce sustancia creada por las atareadas abejas. ¿Cómo producen su oro líquido estas pequeñas alquimistas aladas?
¿Por qué fabrican miel las abejas?
La miel es la forma que tienen las abejas de conservar su alimento para tener algo que comer cuando no hay muchas flores en flor. La miel puede almacenarse en la colmena y consumirse cuando se necesite. Si las abejas almacenaran el néctar sin convertirlo primero en miel, fermentaría.
¿De qué está hecha la miel?
Las abejas comen dos tipos de alimentos, ambos procedentes de las flores. El polen es su fuente de proteínas y el néctar, de hidratos de carbono. El néctar es un líquido azucarado producido por las plantas, cuyo azúcar principal es la sacarosa. Las enzimas del estómago de las abejas lo descomponen en glucosa y fructosa, azúcares más simples. La miel también contiene vitaminas, minerales, aminoácidos, enzimas y compuestos de las flores. Los sabores, fragancias y colores únicos de los distintos tipos de miel dependen del tipo de plantas de las que procede el néctar.
¿Cómo se fabrica la miel?
Cuando el clima lo favorece y las flores empiezan a florecer, las abejas salen de sus colmenas en busca de flores. El proceso de fabricación de la miel es el siguiente:
Una vez que encuentran una flor, utilizan su larga lengua como una bombilla para succionar el néctar, un jugo azucarado, de la planta.
El néctar se almacena en un segundo estómago, también conocido como “estómago de miel”.
Una vez que han llenado su segundo estómago, las abejas regresan a su colmena y empiezan a pasar el néctar por la boca a otras abejas.
Estas abejas mastican el néctar durante unos 30 minutos.
Luego se lo pasan a otra abeja.
A medida que el néctar pasa de abeja a abeja, se convierte en miel.
Una vez que el néctar se convierte en miel, las abejas lo almacenan en celdas de panal, que actúan como pequeños tarros hechos de cera.
A continuación, las abejas baten las alas sobre la miel para hacerla más espesa y parecida a un jarabe en lugar de un jugo dulce.
Una vez que la miel está lista, las abejas sellan la celda con una tapa de cera para guardarla más tarde.
En este punto, los apicultores expertos pueden sacar de la colmena parte de la miel terminada, teniendo cuidado de no dañar ni perjudicar a la colonia.
Las abejas producen una miel deliciosa y ayudan a polinizar las flores para mantenerlas vivas.
Datos curiosos sobre la miel
Una sola abeja produce aproximadamente la doceava parte de una cucharadita (0,8 g) de miel a lo largo de su vida.
Una colonia de abejas necesita 2 millones de visitas a las flores para producir 500 g de miel.
La miel no es una sustancia uniforme: su color varía de casi transparente a muy oscuro.
Hay tantos sabores de miel como plantas con flores de las que se alimentan las abejas.
La miel tiene propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y probióticas. Si se almacena correctamente, la miel nunca se echará a perder.